Lo primero de todo: Estamos todos muy bien.
El viernes por la tarde salimos la avanzadilla: Las furgonetas de apoyo logístico con todo el material, los jefes de campamento (Ana y un servidor), parte del clan piloto y tres jefas de la manada. El viaje fue algo pesado por el tráfico que encontramos.
El viaje en el autobús ayer discurrió perfectamente (llegó al campamento a las cuatro de la tarde, con parada incluida para comer). Y a lo largo del día llegaron también el tercer coche de apoyo y el Padre Arturo.
No os queremos dar demasiada envidia, pero estamos con una temperatura ideal, de 22 grados. Aunque eso implica que por la noche hay que abrigarse bien. Algo de lluvia el sábado por la mañana, algo de sol, algunas nubes, algo de niebla… buen equilibrio.
Y todavía no tenemos demasiadas fotos, bueno, casi ninguna. Toda nuestra energía está concentrada en instalarnos lo mejor y antes posible. Ya hoy por la tarde esperamos empezar a tener alguna construcción terminada (una mesa por aquí, una plataforma por allá…) pero tiempo al tiempo.
Ningún herido ni enfermo, y esperamos seguir así.
El martes que viene es San Benito, patrón de los monjes que nos acogen en su finca. Y lo están celebrando hoy por todo lo alto. Los pilotos y el padre Arturo han participado en la misa con los monjes en el monasterio. Y el próximo martes van a volver para prestar servicio de animación litúrgica, con órgano, cantos… A lo grande. De hecho, San Benito, a parte de patrón de los benedictinos, es también patrón de Guías y Scouts de Europa.
Bueno, pues poco más. Simplemente quería dejar constancia de que todo va bien. A ver si mañana tenemos más fotos. Y alguna aventurilla o anéctota que contar.
¡¡Abrazos y besos!!